Latinoamérica: un modesto consejo para una izquierda confundida
*Atilio Borón*
A
ver, izquierdistas latinoamericanos, piensen un minuto por favor; sólo eso les
pido. ¿Cómo creen que reaccionaría el gobierno de Estados Unidos si la Rusia de
Vladimir Putin, violando la legislación vigente en aquel país, reclutase y
financiase descaradamente a ciertos líderes de opinión, de ONGs, o de la prensa
dizque independiente y los lanzara al ruedo electoral para derrotar al gobierno
o, en su defecto, derrocarlo por la vía sediciosa o promoviendo acciones como
la toma del Capitolio el 6 de enero de este año? En Estados Unidos esos sujetos
serían juzgados y sentenciados a cumplir extensas condenas (hay una ley que
estipula tal cosa desde 1938, dirigida a impedir la difusión de ideas o
actividades pro-soviéticas), y nadie por eso diría que en el país del Norte hay
una dictadura.
Pero
si tal cosa ocurre en Nicaragua, en donde Washington hizo, con total descaro,
lo que hace en todos nuestros países -promover liderazgos opositores a los
gobiernos progresistas, so pretexto de revitalizar la “sociedad civil”,
financiarlos, asesorarlos y ofrecerles protección mediática- y las autoridades
nicaragüenses se defienden con una ley que imita la que existe en Estados
Unidos, ¡ah!, entonces sí, ¡en Managua impera la dictadura! ¿No les parece un
poquitín incoherente?
¡Socialistas,
comunistas, anarquistas, anti-capitalistas de todos los países, por favor:
despierten, infórmense y estudien nuestra historia antes de reproducir el
discurso de la derecha y el imperialismo y condenar –de la mano de Luis
Almagro, Biden, Macri, Piñera, Duque y compañía- con santa indignación a las
recientes elecciones nicaragüenses! No condenen aquí lo que aprueban allá. Y no
se ilusionen: aunque lo hagan, aunque se rasguen las vestiduras repitiendo con
ardor la denuncia de la derecha, ¡jamás les van a creer! Hipotecarán su
coherencia política y encima perderán las elecciones. No se olviden que los
pueblos siempre prefieren el original a la copia.
*El artículo fue publicado originalmente en: Atilio Borón*
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