La verdad ha muerto, el capitalismo del hombre la ha matado
Decía
Nietzsche que , “quien con monstruos lucha, que se cuide de convertirse a su
vez en monstruo, Cuando miras largo tiempo a un abismo, el abismo también mira
dentro de ti.” Recientemente el Presidente de los Estados Unidos, Biden declaró
ante los medios de comunicación, en un acto de bravuconeria que, Estados Unidos
evaluaría la posibilidad de habilitar el acceso al internet a la Isla Cubana
(para evadir el bloqueo establecido por el Gobierno cubano), disponiendo de los espectros electromagnéticos de la Isla
como si fuera de su total disponibilidad.
Una
cosa es tener las posibilidades técnicas, que con seguridad la tienen, otra es
el amparo jurídico y otro el ético, aunque ese último es pedirles peras al olmo.
La
arrogancia es bárbara, nuevas formas de invasión se estrenan, ya no les basta
el monopolio casi absoluto de las redes, ¿o acaso Facebook, Twitter, TikTok,
Youtube, Google no son empresas estadounidenses, con sus servidores en
territorio propio o paraísos fiscales como Irlanda, socios incondicionales? Si
no que, ahora sus herramientas de invasión serán obligatorias. Recuerdan la
escena de la película la Naranja Mecánica del Director Stanley Kubrick, en
donde al protagonista totalmente inmovilizado, sin posibilidad de parpadear,
frente a una pantalla de cine, le introducen unas gotas dentro de sus pupilas,
para provocar un malestar físico, mientras miraba escenas de violencia y
escuchaba Beethoven. Pues el imperio quiere imponernos su filtro de información
y hacerlo obligatorio fuera de su jurisdicción territorial.
Al
final, parece que decidieron no estrenar ese nuevo tipo de invasión o
intervención en Cuba, pero, “en guerra avisada no hay muertos dice el dicho” ya
se han adjudicado el derecho de disponer sobre la soberanía de aquellos países
no alineados a su modelo.
Me
surgen algunas preguntas ¿esa potestad
expresada unilateralmente por los Estados unidos podrá ser traslapada a países como China o
Rusia?
El
resurgimiento de la ultraderecha en diferentes países europeos, son un ejemplo de las metodologías que
enseñan y forman las Think Tank republicanas de los estadounidenses; que no son
otra cosa que, la manipulación de la información por medio de las redes
sociales -la verdad ha muerto, el capitalismo del hombre la ha matado-.
Fabrican muertos, marchas, insurrecciones, las redes prescinde de cualquier
filtro u obligación de cualquier pudor informativo, la masificación de la
información, lejos de convertirnos en el ciudadano superinformado, nos ha
transformado en lo contrario; los errores de la Mátrix son una muestra de ello,
los negacionistas de las pandemias, conspiranoides son el error estadístico que
nos muestra las consecuencias de sus
nuevas herramientas.
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