¿Qué significa el Modelo Cristiano, Socialista y Solidario del Gobierno de Reconciliación y Unidad Nacional?
*Josseline Berroterán*
Para comprender en su integralidad el modelo
cristiano, socialista y solidario, es necesario comprender que surge en un
contexto social, económico y político complejo. Nicaragua se encontraba
sometida a un sistema de desigualdad (1990-2006), que profundizó las brechas
entre quienes tenían acceso garantizado a servicios básicos y quienes no
gozaban de esas garantías, llámense, ricos y pobres, mismo sistema que agudizó
la pobreza y pobreza extrema, así mismo la calidad de vida se encontraba en
índices por debajo del promedio.
El neoliberalismo como modelo político y económico,
mantuvo a la mayoría de los ciudadanos nicaragüenses en unas condiciones
precarias, caracterizado por la explotación del trabajador, escasez de
alimentos y recursos en las familias, un Estado ineficiente que arrojó al
abandono a los sectores más vulnerables de la sociedad como la niñez. En ese
contexto, el FSLN llega al poder en el año 2007 y fundamenta su percepción de
la realidad desde los ideales revolucionarios establecidos en su programa histórico
(1969), que de manera implícita expresa principios y valores como la solidaridad,
el compromiso, el amor, compañerismo, fraternidad y lealtad, reflejados en la
comprensión de la sociedad en comunidad, entendiéndola como un conjunto
conformado de partes que deben organizarse de forma voluntaria para alcanzar
objetivos, es decir, que los intereses de la colectividad deben imponerse por
encima de los intereses individuales, para alcanzar el bienestar generalizado.
Son estas condiciones subjetivas y objetivas que el FSLN
como fuerza política en el poder potencializa, asumiéndolas como sustento y fundamento
para el modelo institucional del Gobierno de Reconciliación y Unidad Nacional.
Lo que este modelo supone es la reconstrucción y construcción de una sociedad
basada en los valores más representativos del nicaragüense, pero que además
significan y le dan sentido a la acción revolucionaria.
En primer término, Cristiano; pero desde una dimensión
de cercanía y valoración de la vida humana, respeto al ser humano a través de
su dignificación y restitución de derechos, es la opción preferencial hacia los pobres para
conseguir el cambio de su realidad, en ese sentido, su desarrollo humano a
través del fomento de capacidades.
Los valores cristianos son rescatados desde esas
dimensiones humanas y comprensivas que buscan colocar a la persona en la
centralidad del programa de gobierno, lo que conlleva entonces, a derribar las
desigualdades y exclusiones existentes en la sociedad, es la garantía de un
trato más humano y sensible ante la cuestión social.
Respecto a los ideales socialistas, éste se refiere a
facilitar las oportunidades de realización, bajo la idea de una sociedad
igualitaria y justa, la visión socialista del gobierno propone romper con el
sistema imperante de desigualdad, desde la redistribución del ingreso, a través
del apoyo hacia los pequeños productores, la pequeña y mediana empresa del
país. Todo este esfuerzo se traduce en programas y proyectos dirigidos a la
mejora de las condiciones de vida, educación gratuita, salud gratuita,
reducción de la desnutrición y seguridad alimentaria.
Otro de los conceptos que se vinculan a este ideal, es
la consolidación de la democracia popular con la construcción del Poder ciudadano, que no es
más que el hecho de transformar en protagonistas de su propia historia a los
nicaragüenses, fomentando la participación e involucramiento directo de todos y
todas desde sus barrios y comunidades. La organización y articulación de la
sociedad, es lo que permite en términos estratégicos la construcción de conciencia
social y la capacidad de proponer soluciones a las diferentes problemáticas
desde sus realidades y necesidades.
Por último, al hablar de solidaridad se refiere al
fomento de la responsabilidad compartida de toda la sociedad para colaborar y
cooperar con el otro, con el que más lo necesite, pero también se habla de la
administración del Estado como ente garante y protector del bienestar social en
todas sus dimensiones, especialmente con aquellas familias de bajas condiciones
económicas. Una forma clara de ejemplificar este principio es con la gestión
ante los desastres naturales, acción que refleja en su máxima expresión la
solidaridad que el gobierno busca fomentar en la sociedad. El objetivo es
revocar el sentimiento individualista que contribuye a una sociedad
fragmentada, en la que todos luchan contra todos, es decir, una sociedad de
consumo programa por los intereses del mercado.
El modelo Cristiano, Socialista y Solidario se debe
entender como la conjunción de principios y valores esenciales que conllevarían
a la vida en armonía, cercanía, democracia, oportunidades y un cambio de la
cultura nicaragüense hacia una sociedad más igualitaria, en donde todos y todas
son protagonistas, heredando a las generaciones futuras una nación de progreso,
estabilidad y con una profunda cultura de paz. Cada uno de estos tres
principios que rigen el actuar y pensar del gobierno se encuentran
interrelacionados, ya que no se puede ser cristiano sino se es solidario con el
prójimo, ni socialista si no se piensa en el respeto y dignificación del ser
humano.
Todo ello conlleva a la integración y restitución de
derechos de los sectores más desfavorecidos históricamente, lo que implica una reivindicación
de grupos sociales como pueblos originarios, mujeres campesinas, niños, jóvenes
y ancianos. Entendidos como actores claves del desarrollo socioeconómico, sin
distinción de raza, sexo, edad, creencias religiosas o inclinaciones
partidarias. El modelo del gobierno sandinista piensa a los sujetos en función
de sus capacidades y aportes, desde sus condiciones hacia la concreción del desarrollo
del pueblo.
Aunque para algunos sectores todo ello sea un intento
discursivo por romantizar un programa político, los hechos y los logros
obtenidos en los últimos años demuestran todo lo contrario, ya que nunca antes
en la historia política del país Nicaragua había experimentado cambios
sustantivos y palpables, que no benefician únicamente a sectores reducidos, la
disminución de la tasa de mortalidad infantil, el aumento del índice de
seguridad ciudadana, la disminución de la tasa de mortalidad materna, reducción
del índice de pobreza, modernización de los procesos institucionales del
Estado, reducción del índice de analfabetismo, acompañamiento a las familias
emprendedoras, bonos solidarios, acompañamiento a los pequeños productores y
agricultores del campo, construcción de carreteras, electrificación, agua y
saneamiento, becas escolares, merienda escolar, apoyo a los jóvenes del campo
con programas de capacitación técnica y
superior, articulación del sistema educativo, fortalecimiento de la red
sanitaria y actualización de la información de enfermos crónicos, gestión de
proyectos de cooperación para las comunidades rurales, empoderamiento
campesino, apertura de los espacios y cargos públicos para las mujeres, pensión
reducida para los ancianos, garantía del 6% constitucional, entre otros tantos
programas y políticas públicas; pensadas y diseñadas desde esos principios que
han caracterizado al gobierno revolucionario.
Por último, cabe destacar que la agenda o programa
político del gobierno sandinista se ha convertido en una propuesta de nación
concreta, atendiendo a las necesidades reales, recibiendo por ello la
aprobación mayoritaria, además de convertirse en el único partido político que
hasta la fecha tiene una propuesta política, económica, social y cultural que
ofrecerle a los ciudadanos, bajo principios y valores fundamentados. El partido
sandinista (FSLN) ha sido el dispositivo e instrumento político que actúa en
representación de la clase trabajadora y bajo los intereses de esas mayorías,
atendiendo al concepto de democracia popular y no burgués.
Referencias:
-Plan Nacional de Desarrollo Humano 2012-2016.
-Plan Nacional de Desarrollo Humano 2018-2021
-Nicaragua: “El pueblo Presidente” (Un pueblo
organizado, protagonista de sus propia historia), 2012.
Comentarios
Publicar un comentario